Desviación del tabique nasal: síntomas, causas y cuándo considerar cirugía
- Dra. Alejandra Ruiz

- 25 jul
- 3 Min. de lectura
Respirar con facilidad es una función tan natural que no solemos prestarle atención… hasta que algo la interrumpe. La desviación del tabique nasal es una de las causas más frecuentes de obstrucción nasal crónica. Muchas personas la padecen sin saberlo, y solo buscan ayuda cuando los síntomas comienzan a afectar su calidad de vida.
En este blog te explicamos de forma clara qué es la desviación del tabique nasal, qué síntomas provoca, cómo se diagnostica y en qué casos se recomienda una cirugía correctiva.

¿Qué es el tabique nasal y por qué puede desviarse?
El tabique nasal es una estructura delgada compuesta por hueso y cartílago, que divide el interior de la nariz en dos cavidades: la fosa nasal derecha y la izquierda. En una nariz sana, el tabique se encuentra relativamente centrado, permitiendo un flujo de aire equilibrado por ambos lados.
Sin embargo, en muchas personas este tabique no está recto. Puede estar desviado hacia un lado o tener curvaturas irregulares, reduciendo el espacio para el paso del aire. Esta condición se llama desviación del tabique nasal.
Las causas pueden ser diversas:
Congénita: la desviación puede estar presente desde el nacimiento.
Traumática: un golpe en la nariz, una caída o una fractura pueden desplazar el tabique.
Desarrollo irregular: a medida que el rostro crece, el tabique puede desviarse gradualmente.
Síntomas de una desviación del tabique nasal
No todas las desviaciones generan síntomas. Algunas personas pueden vivir con el tabique desviado sin mayores complicaciones. Pero cuando la desviación es significativa, los signos pueden ser muy molestos.
Los síntomas más frecuentes incluyen:
Dificultad para respirar por uno o ambos lados de la nariz, especialmente al hacer ejercicio o dormir.
Congestión nasal crónica, que no mejora con medicamentos ni en ausencia de alergias o resfriados.
Ronquidos o respiración ruidosa durante el sueño, incluso en personas jóvenes o delgadas.
Dolor o presión facial, sobre todo en la zona de los senos paranasales.
Dolores de cabeza recurrentes, relacionados con la falta de oxigenación.
Sangrados nasales frecuentes, causados por la irritación de la mucosa.
Sinusitis e infecciones respiratorias recurrentes, debido a la acumulación de secreciones en las cavidades nasales.
Además, esta condición puede agravar trastornos respiratorios como la apnea del sueño o empeorar los síntomas de las alergias estacionales.
¿Cuándo es necesario recurrir a una cirugía?
Cuando los síntomas son leves, se pueden manejar con tratamientos médicos, como descongestionantes, antihistamínicos o esteroides nasales. Pero si la desviación es severa y los tratamientos no funcionan, la opción más eficaz es la cirugía llamada septoplastia.
Se recomienda cirugía cuando:
La dificultad para respirar es constante y afecta el rendimiento diario o el descanso.
Hay congestión persistente que no responde a medicamentos.
Se presentan infecciones nasales o sinusitis frecuentes.
Los sangrados nasales son recurrentes.
Se desea mejorar la calidad del sueño o disminuir los ronquidos.
La septoplastia es un procedimiento quirúrgico que se realiza por dentro de la nariz, sin dejar cicatrices visibles en el rostro. Su objetivo es recolocar el tabique en una posición más centrada, abriendo el paso del aire en ambas fosas nasales.
La mayoría de los pacientes experimenta una notable mejora en la respiración, mejor descanso nocturno y una reducción de infecciones después de la cirugía. Es una intervención segura y eficaz cuando está indicada correctamente.
¿Septoplastia o rinoplastia?
Es común confundir estos términos. La septoplastia corrige el tabique desviado y busca mejorar la función respiratoria. En cambio, la rinoplastia modifica la forma externa de la nariz, generalmente con fines estéticos.
En algunos casos, ambos procedimientos pueden realizarse en la misma cirugía si el paciente así lo desea, combinando beneficios funcionales y estéticos.
Conclusión
Si últimamente has notado que respiras con dificultad, te suena la nariz constantemente, o sientes que no descansas bien al dormir, no lo dejes pasar. Una desviación del tabique nasal podría estar afectando tu calidad de vida sin que lo sepas.
Agenda una valoración con la Dra. María Alejandra Ruiz, quien podrá realizar una evaluación completa, confirmar si existe una desviación y orientarte sobre el mejor tratamiento para que recuperes una respiración libre, cómoda y sin molestias.









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